Santo Domingo, DN – El Consejo Nacional de Drogas (CND) certificó un nuevo grupo de 43 cadetes de 4to año de la cuadragésima séptima promoción, Juan Isidro Pérez de la Paz, de la Escuela para Cadetes Mayor General (R) José Félix Hermida González, P.N., que culminaron el curso taller “Prevención de la Drogodependencia”.

Los cadetes participaron en un curso que duró una semana, organizado a través de la Dirección de Estrategia en Prevención de Drogas y Promoción de la Salud del CND y ejecutado por el Departamento de Prevención en el Área Laboral (DEPRAL).

La certificación se enmarca dentro del convenio de cooperación interinstitucional establecido entre La Policía Nacional, bajo la dirección del mayor general Ramón Antonio Guzmán Peralta, y el Consejo Nacional de Drogas, que dirige el mayor general (sp) Jaime Marte Martínez.

Este acuerdo tiene como objetivo principal acciones de prevención para reducir la demanda de drogas, fortaleciendo las estrategias tanto en seguridad como de salud pública en el país.

La iniciativa forma parte de un esfuerzo integral para mejorar las capacidades de los futuros agentes del orden, alineándose con los objetivos de modernización y profesionalización que atraviesa la Policía Nacional en su proceso de reforma.

Palabras inspiradoras

Durante la entrega de los certificados, el mayor general (sp) Lic. Jaime Marte Martínez, presidente del CND, dirigió unas emotivas palabras a los cadetes, subrayando la trascendencia de su formación y el compromiso que han asumido.

“La insignia que ustedes portarán no solamente es un símbolo de autoridad, sino también un recordatorio constante de la responsabilidad que han asumido de servir y proteger a cada ciudadano”, afirmó Marte Martínez.

Al tiempo de instar a los cadetes a recordar siempre que el verdadero poder reside no en la fuerza, sino en el conocimiento, la justicia, la empatía y el respeto hacia los demás.

Marte Martínez, también destacó la importancia de la ética y la humanidad en el desempeño de su labor. “Ustedes enfrentarán desafíos, habrá momentos de incertidumbre, situaciones complejas y decisiones difíciles; pero es precisamente en estos casos donde su formación, su ética y su grado de humanidad deben brillar con más fuerza”, añadió.

En la actividad estuvieron presentes el general (sp) Nelson Santos, director de Relaciones Internacionales, el mayor Lic. José Manuel Luciano Soriano, subdirector Académico Escuela para Cadetes, la Licda. Lohadis Ureña, directora de Estrategias de Prevención de Drogas y Promoción de la Salud, la Licda. Ángela Ureña, encargada del Departamento de Prevención en el Área Laboral y el Lic. José Antonio Tejeda, director de la Escuela de Formación en Políticas de Drogas.

Desarrollo de los cadetes

La capacitación “Prevención de la Drogodependencia” abarcó una amplia gama de temas, incluyendo la clasificación, efectos de las drogas, los trastornos por consumo de sustancias, la geopolítica de las drogas, las consecuencias legales del tráfico y consumo de sustancias controladas.

Además, se enfatizó la importancia de la gestión del estrés y la ansiedad como una herramienta clave para la prevención de la drogodependencia entre los agentes del orden, promoviendo una salud mental robusta y un entorno laboral saludable.

La capacitación también incluyó módulos específicos sobre factores de riesgo y protección en distintos ámbitos, como el familiar, comunitario, laboral y personal, resaltando el papel crucial que juegan los policías en la construcción de una sociedad libre de drogas.

Esta preparación integral otorga herramientas para que los cadetes no solo estén preparados para enfrentar los desafíos cotidianos de la seguridad ciudadana, sino que también se conviertan en modelos de conducta dentro de sus comunidades.

Convenio efectivo

Con esta certificación, el Consejo Nacional de Drogas y la Policía Nacional refuerzan su compromiso de aunar una formación integral de los futuros agentes del orden público.

Este esfuerzo, no solo contribuye a la mejora de la seguridad ciudadana, sino que también representa un gran aporte para que la Policía Nacional, continúe avanzando en su proceso de transformación, consolidándose como una institución moderna, ética y orientada a la excelencia.